Por sorprendente que pueda parecer (o no), los baterías de metal fueron los pioneros clandestinos del kit híbrido moderno. Tenían dos objetivos: tocar doble bombo a toda velocidad y conseguir un sonido capaz de atravesar el muro sónico de las guitarras y las voces. Desde los 80, los baterías de metal han usado módulos y disparadores electrónicos para que se les escuche alto y claro. Y potente, muy potente. Tres baterías de metal te explican cómo.

POTENCIA TU KIT DE METAL

Si hablamos de bandas de metal, nada como los «cuatro grandes». Uno de los baterías pioneros de metal y thrash, Charlie Benante de Anthrax, fue un pionero en la adopción de muestras electrónicas para potenciar su bombo acústico. Charlie cuenta la historia de cómo se metió en las baterías híbridas y nos enseña su equipo.

SUPERPÓN A TU KIT DE METAL

Algunos baterías superponen muestras en todo su kit acústico, incluida la caja y los toms, pero si hablamos de metal, el que manda es el bombo. Daniel Erlandsson de Arch Enemy explica cómo usa una configuración híbrida para que su bombo tenga presencia en la mezcla.

EXPANDE TU KIT DE METAL

Le puede a pasar a cualquier batería de cualquier género: llega un concierto y te falta un sonido. Puede ser algo tan sencillo como una segunda caja, o algo más específico, como un efecto de sonido, una muestra de voz o incluso una pista de acompañamiento entera. Ampliar la paleta sonora es tan fácil como añadir pads al kit. Adrian Erlandsson, de la banda sueca de death metal At the Gates, nos muestra cómo usa el pad de sampleo SPD-SX con su batería acústica para conseguir los sonidos adicionales que necesita.